• Bolivia

El Alto |

Encarcelado “sin derecho a sol”, así está el presidente de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto, Luis Castaya, quien el 22 de octubre del año pasado fue aprehendido cuando intentaba bloquear la carretera a Oruro por instrucción de los “evistas” y ahora está pagando con creses.

A Luis Castaya, le tocó la peor parte ya que ahora está encerrado en el rincón más macabro de la cárcel de San Pedro de La Paz. Ese lugar se llama la “La Grulla” y presuntamente fue diseñado para encerrar y escarmentar a los delincuentes más peligrosos del país.

La “La Grulla” infunde miedo desde su puerta porque en el lugar hay un letrero que dice: “PREPÁRATE PARA LO PEOR”, quien traspasa esa puerta debe estar preparado para resistir el olor nauseabundo mientras las cucarachas y otros insectos hacen lo suyo al causar más miedo.

En ese escenario triste y espantoso, está encarcelando Luis Castaya. “Si así es. ´La Grulla´ había sido para encerrar los delincuentes más peligrosos, pero lamentablemente mi hermanito está encerrado ahí”, dijo su hermano Jaime Castaya al lamentar la desgracia de su familiar.

“La Grulla”, es un ambiente reducido donde hay pequeños pabellones que miden de “2,5 por dos 2,5 metros aproximadamente” y en esos pequeños ambientes están encerrados varios reclusos que no salen “ni a tomar sol”.

“Los que están en La Grulla, prácticamente no tienen derecho a sol”, dijo Jaime Castaya mientras de sus ojos comienzan a salir algunas lágrimas que le obligan a preguntarse. ¿Qué siempre ha hecho mi hermano para que lo castiguen así?.

Al interior de la cárcel, casi todos los reos coinciden en decir que “La Grulla” “es para los machos” porque generalmente trasladan a la zona a los reos que se portan mal o a los antisociales reincidentes.

“Yo he visitado a mi hermano varias veces y sinceramente me ha dado mucha pena. A ese lugar no llega ni un rayo de sol y el ambiente ese bien feo”, dijo al detallar que los visitantes para cruzarse en los pasillos deben hacerlo de “costadito” porque no hay espacio ni para caminar de frente.

EL PROBLEMA 

La situación del dirigente Castaya que dice ser uno de los presidentes de la Fejuve, se agravó el día en que puso las manos al fuego por el expresidente Evo a quien el 2024 empezó a defenderlo “a raja tabla”.

En esa lógica, el 22 de octubre del 2024, Castaya fue a la Apacheta de la carretera a Oruro para comenzar con el bloqueo de carretera instruido por Evo. Ese día los radicales le acompañaron masivamente, pero una vez que fue detenido los “evistas” desaparecieron del mapa.

Antes del conflicto, los diputados “evistas” supuestamente le llamaban a Castaya matiné, tanda y noche para decirle “hermano tienes que movilizarte” y ahora no le llaman ni para saludarle.

El detenido es papá de cuatro hijos, de los cuales el último es un bebé de 7 siete meses por quien su mamá ya no sabe qué más hacer porque los últimos centavos que tenía se le fueron acabando “uno a uno”, por esa razón Jaime Castaya camina buscando la libertad de su hermano Luis Castaya.